lunes, 31 de agosto de 2015

Por una vivienda

En el primer semestre de 2015 se duplicaron los precios de las viviendas en la Gran Caracas.       Por Francisco Olivares - El Universal - Caracas - 30/08/2015  


El propósito de obtener una vivienda propia para una familia de clase media en Venezuela, ha pasado de ser un plan de vida tangible, a un sueño casi inviable para un alto porcentaje de esa población. En enero del año 2015, el promedio del costo del metro cuadrado de una vivienda en el Área Metropolitana de Caracas era de 252.851 bolívares y para junio de este año alcanzaba a 603.368 bolívares, un aumento superior a 100%. 

Esto quiere decir, que el promedio del costo de las viviendas que están en oferta en la Gran Caracas, es de 60 millones de bolívares. El estimado corresponde a las cifras promedio que maneja la Cámara Inmobiliaria Metropolitana de acuerdo a la oferta que existe en el mercado inmobiliario durante el primer semestre de 2015. Un apartamento en la parroquia La Candelaria puede costar aproximadamente entre 40 a 50 millones de bolívares, mientras en urbanizaciones del este, entre 200 y 600 millones, en tanto que otras opciones de mayor nivel, que no se publican, se tasan en dólares.

En el marco de las distorsiones que se han generado en la economía venezolana, la situación de la vivienda registra una serie de factores que hacen muy compleja esta área fundamental para el desarrollo de las ciudades. Aquiles Martini, quien hasta hace poco presidió la Cámara Inmobiliaria y actualmente encabeza la Comisión de Infraestructura y Vivienda de Fedecámaras, identifica una serie de aspectos que han generado la actual situación en los que se suman: la alta inflación, escasez de materias primas, leyes que limitan la inversión inmobiliaria, el déficit en la construcción de viviendas, falta de planificación urbana y las intervenciones sobre promotores y constructores

Un elemento que contribuye a la poca oferta de inmuebles, ha sido también la Ley de Regularización y Control de los Arrendamientos de Vivienda aprobada en 2011. En 1998 las viviendas en alquiler representaban 30% de la demanda residencial, mientras que en 2015 es menos de 1%, según cifras que maneja la Asociación de Propietarios de Inmuebles. En la actualidad se procesan 45 mil juicios de inquilinato y 11 mil procedimientos administrativos, la mayoría de las causas es por incumplimiento de pago de los inquilinos y la negativa a abandonar el inmueble. Vale destacar que 65% de los inmuebles de vivienda arrendados en la actualidad se encuentran en sectores populares. 

El déficit

Las necesidades habitacionales, cuando se inicia el gobierno bolivariano en 1999 era de un millón 900 mil viviendas. A partir de 2009, con el programa Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV), el déficit llegaba a 2 millones 700 mil viviendas, mientras que para 2015 está llegando a 2 millones 900 mil viviendas. Ese déficit se incrementó, a pesar del gran volumen de unidades construidas entre 2011 y 2014 por el sector público a partir de la GMVV. 

Según explica Martini, al déficit que se arrastraba se le suman las necesidades de nuevas viviendas que se generan por el crecimiento anual de la población en el país que demanda de 120 unidades nuevas por año.

De acuerdo a las cifras oficiales recopiladas por la CIV, basadas en los informes del BCV, INE y Cámara de la Construcción, entre 2011 y 2015, se construyeron en Venezuela 718.414 viviendas. Hay que destacar que ese monto significativo por el aporte de las viviendas construidas por GMVV, incluye lo aportado por el sector privado.

Sin embargo, precisa Aquiles Martini, que a las cifras que ofrece el BCV sobre construcción de viviendas, se fue modificando a partir de 2009 y a la data se le agregaron las viviendas remodeladas que forman parte de programas sociales como Barrio Tricolor, sustitución de ranchos por casas, programas manejados por los Consejos Comunales, con la data que aportan esos organismos. De tal manera que en la cifra no se discrimina ese tipo de programas de aquellas que son realmente nuevas viviendas.

Las estimaciones para obtener la cifra real de nuevas viviendas, de acuerdo a cálculos de la CIV, habría que restar aproximadamente dos terceras partes de la cifra total, lo cual reduciría la cifra en 400 mil viviendas aproximadamente.

Sector privado 

La Cámara Inmobiliaria registra 18 trimestres consecutivos de caída en la construcción de viviendas nuevas del sector privado. De cerca de 70 mil viviendas que construía el sector privado en promedio en años anteriores, en 2014 apenas se lograron construir 15 mil viviendas. Explica Martini que además hay que tomar en cuenta que muchos de los urbanismos que se suman a las viviendas construidas en ese año, ya habían sido desarrolladas en años anteriores y sostiene que en 2015 la cifra de construcción privada será aún más baja. De acuerdo a los registros de la Cámara de la Construcción, la caída del sector en el primer semestre de 2015 es de 25%.

Al revisar los números de la GMVV también se observa una caída a partir de 2014 cuando se construyeron 126 mil unidades (público y privado) mientras en lo que va de 2015 la producción hasta el 28 de julio era de 44.293 viviendas, sumando ambos sectores.

A juicio de Aquiles Martini uno de los factores que generó esta caída en el sector privado, además de la falta de materias primas como la cabilla que proviene de Sidor y el cemento, cuya producción igualmente está en manos del Gobierno, han sido las intervenciones de los proyectos privados y las leyes regulatorias.

Una de estas leyes, la Ley contra la Estafa Inmobiliaria aprobada en 2012, según opina el especialista, parte de la mala fe hacia el promotor y el constructor y contiene una serie de enunciados que hacen inviable la construcción de viviendas. Esta ley regula toda la aparte de construcción de viviendas, los precios, las fórmulas en que se pide el dinero, y hace al constructor el responsable penal de los retrasos que puedan ocurrir, así por ejemplo, tengan su origen en la falta de insumos. 

Según la CIV la falta de insumos también está vinculada a la caída de la producción que ha afectado a Sidor, que de 4,5 millones de toneladas que producía en 2008 cuando no había sido estatizada por el Gobierno, en 214 se reportó una producción de un millón de toneladas, y este año está reportando una caída mayor. Esa caída también ha afectado la producción del sector público.

Precios tope

Otro aspecto que destaca Martini es que se le puso un techo al valor de la vivienda que el Gobierno le reconoce al sector privado, por ejemplo, en el plan "0800 mi hogar" se establece un tope de una banda que va desde 747 mil bolívares hasta un millón 250 mil bolívares. "Obviamente que construir a esos precios a la realidad de hoy resulta inviable" señala. 

Para explicarlo, Martini pone como ejemplo que un ascensor que se calculó a 6,30 por dólar ahora hay que pagarlo a precio del mercado paralelo. Una cabilla que está regulada en 10 bolívares el kilo ahora hay que pagarla en el mercado negro en 10 a 15 veces más del valor regulado. Lo mismo sucede con el cemento, con los componentes para el baño, con los cables, tuberías etc. 

Aún así, partiendo de que existiese una vivienda a un costo de un millón de bolívares, según los precios del Gobierno, un comprador con ingresos medio, podría obtener un crédito máximo de 500 mil bolívares, pero entonces tendría que poner de su bolsillo otros 500 mil bolívares, precisa Martini. 

El tope máximo que presta la banca pública a través de los fondos propios de la cartera de la banca son 3 millones de bolívares. Pero el solicitante debe ganar 15 salarios mínimos, esto es 120 mil bolívares mensuales, y solamente 2% de la población tiene ese salario, según el INE. 

"La vivienda tiene un precio referencial y es el activo más importante de la familia venezolana y la tiende a valorizar o bien en moneda extranjera que hoy es legal o en su valor de reposición. Entonces nadie va a vender su casa en un bolívar si la nueva le va a costar tres bolívares".

Expropiaciones 

El domingo 31 de octubre de 2010, a través del programa "Aló Presidente", el fallecido presidente Hugo Chávez anunció la expropiación de varios urbanismos privados en todo el país que se encontraban en proceso de construcción y preventa. Un informe elaborado por el investigador y experto en políticas públicas en materia de vivienda, Miguel Méndez Rodulfo, explica en un informe elaborado sobre ese proceso expropiatorio que "mediante varios decretos, emitidos en noviembre y diciembre de ese año, se fueron afectando, primero los urbanismos denunciados en la alocución presidencial y luego otros conjuntos, hasta que finalmente sumaron 57 desarrollos los que fueron objeto de esta medida".

"La expropiación comprendió medidas de ocupación temporal de las sedes administrativas de las empresas y multa de 5.000 unidades tributarias. En los hechos, la expropiación significó la confiscación de los lotes de terrenos, edificios de viviendas, áreas comunes, almacenes, depósitos, oficinas, maquinarias, materiales, equipos y vehículos, cualesquiera otros bienes muebles o inmuebles, maquinarias, equipos industriales y de oficina, implementos de trabajo y otros materiales dispuestos para la construcción del desarrollo mencionado" indica el informe del especialista.

Uno de los argumentos expuestos por el Presidente Chávez, era que: "Esos desarrollos están paralizados y la gente ya pagó, ahora nosotros expropiamos, vamos a terminarla, vamos a readecuar los precios, vamos a multar estas empresas y vamos a entregarlas". En su intervención expresó: "Ordené a la Fiscalía General de la República, para que actúe de inmediato contra las empresas involucradas en las estafas, congele cualquier bien o cuenta bancaria, para evitar su movilización y garantizar que las personas que han depositado sus recursos puedan recuperar su dinero".

El informe de Méndez indica que la mayoría de los urbanismos estaban avanzados en 75% y los compradores de esos conjuntos habrían de esperar al menos un año y medio para finalmente recibir su vivienda. 

En junio de 2014, muchos propietarios de la clase media y media-baja, con opción para adquirir vivienda en los urbanismos intervenidos, entre 2010 y 2013, introdujeron un recurso ante el Tribunal Supremo de Justicia solicitando la acción de nulidad de la Resolución 061. Dicha resolución afectó a 20 mil familias de todo el país. Actualmente se espera el dictamen del TSJ, indica el informe.

sábado, 1 de agosto de 2015

¿Dónde están los millardos?

Por Fernando Luis Egaña - El Nacional - 01/08/2015
Según los reportes oficiales de Pdvsa, sus ingresos en dólares en los años 2013-2014, suman la cantidad de 262.765 millones de dólares. Es decir, un poco más de 262 millardos de dólares. En el 2013, 134,4 millardos de dólares, y en el 2014, 128,5 millardos de dólares. Para tener una aproximación comparativa de lo que esto significa, 262 millardos de dólares sería el equivalente de las exportaciones de Chile durante casi tres años y medio, de las exportaciones de Colombia durante cuatro años y medio, y de las exportaciones de Perú durante seis años. Países que, bien se sabe, tienen una situación económica positiva, con sólido crecimiento, muy baja inflación, importantes inversiones extranjeras y pleno abastecimiento.
Ojalá y el asesor económico de Maduro, el español Alfredo Serrano, autor, por cierto, de un libro titulado El pensamiento económico de Hugo Chávez, pudiera explicar cómo es que con 262 millardos de dólares de ingresos de Pdvsa, solamente en los años 2013 y 2014, el país está como está: con la inflación más alta del mundo, con escasez generalizada y creciente de todo tipo de productos básicos, comenzando por alimentos y medicinas; con una recesión económica que se transmuta en depresión, con una desbarajuste cambiario brutal que genera un empobrecimiento brutal, con una parálisis absoluta de inversiones extranjeras y con unas perspectivas que son todavía más ominosas. Todo eso, repito, con 262.000 millones de dólares en ingresos de Pdvsa entre el 2013 y el 2014, y sin contar los ingresos del 2015.
Los voceros de la hegemonía, comenzando por Maduro, explican esta situación con el cuento de la “guerra económica”. Pero uno se pregunta: ¿qué guerra es esa que permite ingresos por 262 millardos de dólares en apenas 2 años? El ex ministro Giordani tiene otra explicación, no muy técnica, pero acaso más persuasiva: la raspada de olla. En pocas palabras, la hegemonía despótica y depredadora que lleva años en el poder, está siendo más depredadora que nunca. En esas coordenadas debe ubicarse la explicación de la catastrófica realidad porque, ¿en dónde más?

En la realización de una gran obra de gobierno no pueden estar esos 262 millardos de dólares, porque no hay realización de una gran obra de gobierno y, ni siquiera, de una modesta obra de gobierno. El deterioro de Venezuela en todos los frentes es acelerado y ello incluye a todas las áreas de responsabilidad primaria del sector público. Todas sin excepción. Desde el resguardo de la seguridad pública, pasando por la gestión de las empresas básicas de Guayana, y abarcando el vasto repertorio de funciones gubernativas que la hegemonía fue llevando hasta el paroxismo.
En el mejoramiento de la calidad de vida del conjunto de los venezolanos tampoco pueden estar esos 262 millardos de dólares. La pobreza aumenta, la violencia criminal aumenta, la escasez y la carestía aumentan, el agobio y el temor social aumentan. Y lo que sí debería aumentar, que es el valor efectivo de los salarios, no hace sino disminuir. Con el salario mínimo oficial de Venezuela, si acaso se podrían adquirir 10 dólares. ¿Cómo es eso, pues, que con ingresos de Pdvsa de 262.000 millones de dólares, solamente en los 2 últimos años, sin contar el actual, el salario mínimo del venezolano esté en 10 dólares, y cayendo?
Y para agravar las cosas, a los ingresos que Pdvsa reporta habría que añadir el enorme endeudamiento externo contraído en esos años, y los ingresos tributarios no petroleros. Y para agravar las cosas, aún más o muchísimo más, habría que añadir el agregado de los ingresos a lo largo del siglo XXI, época de la bonanza petrolera más caudalosa y prolongada de la historia, así como también el agregado de la gigantesca deuda externa que se fue contrayendo en esos años, sobre todo desde el 2008.
Y en verdad ¿qué es lo que tenemos? Pues lo que tenemos es una mega-crisis de una dimensión tan profunda y extendida que entra en los terrenos de la crisis humanitaria. No ha debido ni debería ser así, sobre todo en consideración a los cuantiosos ingresos de Venezuela, cortesía del mercado petrolero internacional. Ya Maduro, tan solo en el 2013 y 2014 ha recibido 262.765 millones de dólares en ingresos de Pdvsa. Más de 262 millardos de dólares. ¿Dónde están?

flegana@gmail.com 

domingo, 26 de julio de 2015

La casa grande

Por Leonardo Padrón - El Nacional - Venezuela - 26/07/2015
Tiempo de tormenta. Turno de decisiones. Clima de borrasca y viento. Luz difícil.                     
Desde hace meses no dejo de recibir invitaciones a charlas, conversatorios y tertulias que gravitan alrededor del mismo tema: las razones para seguir apostando por el país, para quedarse y lidiar, para no irnos en desbandada. No es un tema fácil. Es complejo por inédito, por extraño a nuestro hábito, por subjetivo y personal. Es un tema espinoso por el espinoso país que hoy vivimos. Por el caos que nos rodea. Por la violencia de la marea que golpea nuestras certidumbres y ataduras.
Ahora bien, ocurre que habitualmente uno no anda explicando las razones que tiene para no irse de su casa. Uno, simplemente, está, permanece, hace hogar en ella. Construye familia. Teje su día a día. Come allí, duerme en ella, la pasea descalzo, se demora en sus ventanas, erige su biblioteca, pone su música, domestica su almohada, conoce sus ruidos y caprichos. Es el lugar donde pugnas con tus gripes, tus despechos o tus resacas. El espacio donde ocurren tus epifanías y descalabros. Donde más has celebrado la navidad, los pequeños triunfos y cada nuevo centímetro de altura de tus hijos.

Mi casa, si me pongo específico, limita al norte con la fiesta que es el Caribe, al sur con la selva fantástica de Brasil, al oeste con kilómetros de vallenato, cumbia y hermandad y al este con la vastedad del Atlántico y ese litigio histórico, otra vez de moda, que es Guyana. Mi casa tiene el techo azul casi todo el año. Mi casa es un clima de mangas cortas y risa fácil. Mi casa tiene un catálogo de playas irrepetibles. Y si la camino a fondo me topo con la belleza de sus abismos de agua, con la neblina a caballo de sus páramos, con sus árboles redondos, con su sol de tamarindo y papelón. Mi casa tiene 30 millones de habitantes. Tiene un océano de mujeres hermosas, nocturnas y sensuales. Mi casa es una geografía vehemente y delirante. La han llamado Tierra de Gracia, Pequeña Venecia, Norte del Sur, El Dorado, Crisol de Razas, Paraíso Perdido. En mi casa se baila en todas las esquinas, se toma cerveza sin piedad, se coleccionan abrazos, se hace el amor en cada vestíbulo, y se hace el humor hasta el amanecer.
En mi casa está mi infancia, mi ventana y mi lámpara, mi postre favorito, mi carro, mi lista de amigos, mi cine recurrente, mi ruta de librerías, mi estadio de beisbol, mi zona de costumbre y apegos. El sol nace y se pone en mi casa.
Resulta que mi razón de ser, lo que me explica y define,  limita por todas partes con mi casa. Este es el domicilio de mis entusiasmos y obsesiones.
Tengo una vida entera en ella. Y una vida entera es mucho tiempo. Es todo el tiempo. Una vida amueblada por mis años, mis logros y mis mejores fracasos.  
Y sucede que a pesar de todo eso, tengo que explicar por qué no me quiero ir de mi casa.
                                      ***
Generalmente, cuando no llega el agua a mi casa averiguo, pregunto, resuelvo, compro, instalo un tanque. Cuando aparecen filtraciones busco, llamo, persigo al plomero. Cuando la basura se acumula en el depósito reclamo, toco la puerta, hablo con la junta de condominio. Cuando se agrietan sus paredes, cuando se colma de insectos, cuando la cubre el polvo, cuando se trastornan sus aparatos, cuando la polilla ataca, en todos esos casos, no suelo irme, no desisto, no salto por la ventana. Sencillamente, me ocupo. La lleno de atenciones. Busco prodigios que la sanen. 
Sí, en estos tiempos las goteras se han vuelto absurdas, el techo se ha corrompido, el agua sale negra, la luz es escasa, el tronar de las armas eclipsa el bullicio de las guacamayas, la nevera se ha llenado de vacío y nostalgia, a los insectos se le han sumado alimañas impensables. Mi casa es hoy un tesoro arruinado, malbaratado, saqueado. Pero es mi casa. Me cuesta no atenderla. No procurar remedios. No aportar la cal de mis opiniones, la despensa de mis esmeros, el martillo de mi insistencia y su tanto de ética, perspectiva y confianza.
Mi casa está rota. Y yo me sumo a la reparación. No al adiós. Irme es un verbo posible. Tengo derecho a hacerlo. A veces me intoxico de ganas. Pero entiendo que en cualquier otro confín seré un extranjero. Un emigrante. Un nómada accidental.
Es una opción válida, legítima. En ciertos casos, emocionante, y en otros, atemorizante. Es irresponsable juzgar a quien se va. Irse posee el calibre de las desgarraduras. El exilio es una palabra llena de piedras. Quien parte intenta llevarse el peso existencial de la casa. Busca sostenerla desde la distancia. Toda mudanza es incertidumbre y desvelo. Es una acrobacia espiritual.
Hay vecinos que se han ido, otros que están haciendo maletas, ensayando un nuevo idioma, aprendiendo a usar un GPS. Mis hijos se despiden de sus mejores amigos. Mi pareja se despide de sus mejores amigos. Mis mejores amigos se despiden de sus enemigos.
Le pregunto a mi hija de 13 años por qué no se iría del país. Me suelta una ráfaga de sustantivos: la gente, el clima, el idioma, la comida, el paisaje, los amigos. Y agrega algo inesperado: “Me gustaría estar cuando se arreglen las cosas y ver el cambio”. 
                                       ***
Hace poco leí en el blog de alguien un concepto interesante. Decía Daniel Pratt: “migrar es aceptar que tu lugar y tú no pueden continuar juntos, rendirse, asumir que no hay manera de arreglarlo. Tienes que divorciarte, perder, naufragar (…)  Desde el momento que partes eres extranjero siempre, hasta en tu propio país”.
Y, vamos a estar claros, hay mil razones para irse, y quizás solo diez para quedarse. Pero esas diez razones pueden justificar tu vida. 
En estos tiempos los venezolanos estamos viviendo una experiencia inédita. En esta época de ideologías y militancias extremas, el desencanto ha hecho que el país esté advirtiendo el mayor de los éxodos de su historia. Me he topado con la conmovedora circunstancia de ver a una madre hacer todo lo posible por separar a su hijo de ella. Apurándolo para que se vaya a estudiar a Calgary. Lejísimo. Para salvarlo. Para saberlo seguro.
Y, ciertamente, las migraciones son tan antiguas como la especie humana. No debería alarmarnos tanto. Cada ser humano está obligado a vivir sus propios renacimientos.
         Pero la casa no puede quedarse sola. Necesita la atención de sus propietarios. Este extrañamiento, este estupor colectivo, nos hace comprometernos aún más con el momento histórico que estamos viviendo.  
                                               ***   
¿Es este el fin del país? No. Los países no concluyen. Es este un episodio severo. Amargo. Ruinoso. Se habla de la inflación más alta del mundo. De la escasez más pavorosa que hemos vivido. Del corrimiento del sistema de valores. De una violencia sórdida y copiosa que ha convertido al mapa entero en sangre y luto. Así de grave está la casa, así de extrema la inundación. Sí, hacemos agua por todas partes. Los pronósticos del tiempo anuncian sólo noticias oscuras. Entonces, ¿desertamos?, ¿desmantelamos lo que queda? Es una opción, pero ¿realmente queremos renunciar a nuestra casa?
Si esta es la piedra fundacional de nuestros días, ¿qué estamos haciendo para detener su ruina? ¿Basta con el largo quejido que hoy somos? Si no nos involucramos, toca renunciar, incluso estando adentro.  Dejar que otros impongan la ruta de nuestros afanes.  
Es fácil ser ciudadano de un país cuando el viento es benigno, cuando el subsuelo es oro, cuando el peatón ejerce la alegría como contraseña, cuando la comida abunda, cuando el mar es amable y no hay marea alta en el horizonte.
Pero también hay que ser ciudadano cuando el país está enfermo, acosado por la indolencia, atascado en un pantano de errores, cuando es víctima de sus propias contradicciones. El país, nuestra casa mayor, nos necesita en su adversidad, en sus fiebres, en la penuria y la borrasca. Querer a alguien es también lidiar con su infortunio. Si tu pareja se enferma de cáncer, ¿la abandonas?, si tu mejor amigo cae preso, ¿renuncias a visitarlo?; si tu hijo sucumbe a las drogas, ¿le das la espalda?, si tu madre comienza a sufrir de Alzheimer, ¿le sueltas la mano y dejas que camine sola hacia la locura? Supongo que no. Pasa igual con el país. Si los que aquí insistimos no nos comprometemos en buscarle cura a sus desvaríos, en otorgarle coherencia y sensatez, entonces no vale la pena quedarnos.
Los optimistas (dicen que es una raza en extinción en el territorio nacional) saben que toda crisis genera una mina de posibilidades. Repito a  Francois Guizot en su afirmación de que los optimistas son quienes transforman al mundo. La lección ante nuestros errores acumulados ha sido amarga. Pero es hora de responder. De apostar duro. De vivir cada día como construcción. De devolverle a esta tierra de gracia todo lo que nos ha dado, empezando por el derecho a existir y crecer en su aire, en su luz, en su maravilla, maravilla que vamos a devolverle con nuestras ganas de seguir perteneciendo a un gentilicio, de seguir viviendo en la casa grande de nuestra existencia. 

martes, 16 de junio de 2015

PDVSA es otra

Por José Toro Hardy - El Universal - 16/06/2015

La Pdvsa meritocrática llegó a producir 3,7 millones de barriles de crudo por día en 1997, con una capacidad de refinación alcanzaba los tres millones de barriles/día en el mundo, con producción petroquímica de 4,1 millones de toneladas año, una producción de carbón de 5,1 millones de toneladas al año, que producía 4,7 millones de toneladas de Orimulsión y adelantaba el proyecto Cristóbal Colón para el aprovechamiento de las enormes reservas de gas no asociado al Norte de la península de Paria. 

Aquella empresa estaba asociada en Jose con 4 grandes centros de mejoramiento de crudo para la conversión de los petróleos extrapesados de la Faja en crudos sintéticos de alto valor. 

Era una corporación energética global que contaba en Venezuela con 5 grandes refinerías: Amuay, Cardón, Bajo Grande, El Palito, Puerto La Cruz y San Roque; y a nivel internacional contaba con 7 grandes refinerías en EEUU: Lake Charles, Paulsboro, Chalmette, Corpus Cristi, Saint Croix, Lyondelle, Savanah, Sweney, Lemont; contaba con la propiedad compartida de 4 refinerías en Alemania en asociación con Ruhr Oel; tres refinerías en Suecia, Bélgica y el Reino Unido en asociación con Nynas; una refinería en Curazao, además de un centro de almacenamiento Bopec- Borco en el Caribe y una flota de supertanqueros.

De Sur a Norte

Aquella empresa disponía de infinidad de terminales y una red de oleoductos en EEUU que atravesaban ese país de Sur a Norte y a lo largo del Golfo de México. Contaba con cerca de 15.000 estaciones de servicio abanderadas con la marca Citgo, filial que pertenecía 100% a Pdvsa y que llegó a controlar el 10% del mercado interno de combustible en EEUU.

Podíamos llevar el petróleo desde nuestros propios yacimientos hasta los tanques de gasolina de los automovilistas americanos pasando todo el tiempo por instalaciones venezolanas.

Era además Pdvsa no sólo la segunda mayor empresa petrolera del mundo, sino que además éramos la que tenía menor nivel de endeudamiento y mejores índices de estabilidad, solvencia, rentabilidad, utilidad neta, solidez, etc. 

Pero esa tacita de plata fue sacrificada en el altar de la revolución. Hoy es la Pdvsa "de todos" y de ella se benefician todos los cubanos, los nicaragüenses, los haitianos, los bolivianos, los ecuatorianos, los salvadoreños, los dominicanos, los jamaiquinos, guyaneses, los uruguayos, etc. Los niveles de eficiencia de la Pdvsa "de todos" se han venido al suelo. La producción petrolera ha caído dramáticamente y el nivel de mantenimiento de las instalaciones da vergüenza. 

Pdvsa perdió también su misión y su visión. Antes era una empresa petrolera, ahora no sabemos lo que es. Parece más bien un centro de adoctrinamiento asfixiado en un mar de dogmatismo y politiquería. 

Pdvsa es hoy en día responsable de la inflación que padecemos los venezolanos. Con un déficit en su flujo de caja (que algunos estiman en unos 19.000 millones de dólares al año), la única forma de que la empresa sobreviva es con apoyos financieros del BCV, mediante la emisión de dinero inorgánico. Ese dinero se incorpora a través de Pdvsa a la masa monetaria que circula en el país. Es la causa de la inflación que está destruyendo a nuestra economía.



Padecimiento

Ese dinero írrito (por calificarlo de alguna forma) genera demanda de bienes, pero como existe una inmensa escasez, lo que termina logrando es un grave impacto en el nivel de los precios. Es la causa de las inmensas colas que tenemos que hacer los venezolanos cada vez que vamos a un automercado, para salir después frustrados porque no conseguimos los bienes más elementales que requerimos. Ese dinero nos ha llevado a padecer la mayor inflación del planeta. Ese dinero está creando distorsiones de todo tipo que humillan a los ciudadanos. En muchos automercados y redes de farmacias se están instalando captahuellas que es una de las formas de racionamiento más perversas que conoce la humanidad. Se ha llegado al extremo inaudito que para comprar un simple rollo de papel toilette, tengamos que colocar nuestra huella digital en esas máquinas captahuellas, sin que los ciudadanos podamos saber que fin ulterior pretende darle el gobierno a esos archivos de huellas digitales.

Pero peor aún, ante la grave escasez que impera, los bolívares excedentarios se desvían hacia la compra de dólares en el mercado paralelo, contribuyendo así a una espiral indetenible de su valor. Esos dólares, llegan a transformarse en la referencia que tiene que usar el comercio a la hora de estimar el costo de la reposición de sus inventarios. Todo este mecanismo absurdo es causado por la ignorancia y el dogmatismo de quienes hoy en día manejan no solo nuestras políticas públicas, sino además el BCV y Pdvsa.

petoha@gmail.com

@josetorohardy

sábado, 23 de mayo de 2015

Las claves para manejar la seguridad de tu condominio

Por Alberto Ray - El Nacional - 21/05/2015
Si tuviera que listar el número de consultas que me hacen sobre seguridad, no me queda duda que la primera tiene que ver con los condominios. De hecho, revisando mis notas me extraña no haber abordado el tema anteriormente. Nunca es tarde sin embargo, cuando de prevenir se trata.
Las preguntas y dudas son proporcionales al incremento de los incidentes que casi a diario me llegan por distintas vías. Bandas de delincuentes que toman edificios enteros, secuestros en las entradas de los garajes, robos y hurtos en los apartamentos, y vehículos desvalijados en los estacionamientos son una corta pero contundente relación de problemas que afectan al ciudadano, justo en el sitio más sagrado que es su hogar. 
En primer lugar, la seguridad en un condominio depende de cuatro elementos que son sus bases: Normas, Recursos Humanos, Infraestructura y Tecnología.  No es posible alcanzar niveles aceptables de tranquilidad y paz si estas cuatro piezas no están presentes y combinadas en sus justas proporciones. A estas se le agregan otros tres factores igualmente indispensables: la supervisión, la cultura de prevención de los residentes y las relaciones con el entorno.

Normas: son las reglas que establecen el “Deber Ser”. Es un contrato social de convivencia entre los residentes. Deben ser aceptadas, practicadas y vigiladas por todos en la comunidad. Cada condominio puede contar con al menos tres normas de seguridad indispensables; control de acceso, operaciones de seguridad y regulación de espacios de uso común. Deben estar escritas en un lenguaje sencillo para facilitar su entendimiento. Es responsabilidad de la administración del edificio dar a conocer estas reglas. Usualmente, a las normas de seguridad se le suman las cláusulas de convivencia. Este cuerpo de disposiciones dan la base para separar lo correcto de lo incorrecto, por lo que no deben obviarse las recompensas y sanciones. Con la aprobación de la comunidad,  es conveniente nombrar un grupo de responsables de la seguridad quienes tendrán la potestad y obligación de administrar con justicia este micro sistema de convivencia y protección.
Recursos humanos de seguridad:  todo condominio requiere personas involucradas directamente con las funciones de seguridad. Ya sean guardias contratados, conserjes, porteros o residentes que se desempeñen como supervisores en el cumplimiento de las normas. El guardia de seguridad debe tener por escrito y conocer al detalles las responsabilidades de su cargo. Mientras más tareas vinculadas con la protección del inmueble y sus residentes tenga, mejor. El ocio es amigo de la distracción. No permita que el personal de protección tome decisiones basadas en su criterio. En un condominio los criterios de seguridad pertenecen a los residentes organizados en Junta. Son estos quienes deciden los límites de la vigilancia. Un guardia de seguridad debe ser amable en su trato y firme en su proceder, por lo que debe empoderársele dentro de los parámetros de la norma. Precisamente, la norma de Operaciones de Seguridad sirve para establecer su escenario de acción y sus formas de proceder.
Infraestructura: es el conjunto de bienes inmuebles en los que se desarrollan las actividades del condominio, tanto en sus espacios públicos como en áreas más restringidas. En la infraestructura se encuentran todas las construcciones destinadas específicamente a la seguridad (cercas, muros, centros de control, puestos de vigilancia, etc.). Buena parte de las vulnerabilidades de un condominio están en este importante aspecto. Un componente de primer orden dentro de la infraestructura son los acceso peatonales y vehiculares. Ellos requieren especial atención, pues allí deben confluir todos los elementos de la seguridad. La infraestructura de seguridad representa un reto adicional para los arquitectos al momento de diseñar barreras y accesos seguros pero con alto sentido funcional y estético.
Tecnología: son los sistemas y equipos que se emplean como herramientas para brindar protección a las personas y la infraestructura. Es una tendencia en instalaciones de gran tamaño, centralizar el control tecnológico en centros de comando para la seguridad. En ellos, se monitorean y administran los sistemas o plataformas de manera eficiente y con sentido integral. Contar con recursos humanos bien capacitados es clave para la correcta operación de la tecnología. Recuerde que la tecnología no sustituye otros recursos, solo los complementa de una manera más efectiva. En esta categoría entran las cámaras de seguridad, las llaves y cerraduras, los cercos eléctricos, los botones de emergencia, las alarmas, etc.
La integración de normas, recursos humanos, infraestructura y tecnología conforman un bloque de seguridad, que bien diseñado y operado genera resultados positivos y de gran valor para el condominio.
A esta estructura básica y clave de seguridad se agregan en un segundo nivel, la supervisión, la cultura de prevención y las relaciones con el entorno. Se puede decir que la combinación y articulación de estos tres elementos constituyen el “software” de la seguridad, porque están vinculados con el comportamiento humano, que en definitiva puede ser la pieza más frágil al momento de proteger al edificio y sus habitantes.
Supervisión: es la garantía que la seguridad opere según las normas y bajo los parámetros que representen la tranquilidad de los residentes del condominio. No existe seguridad sin la supervisión de sus procesos. Constatar que la vigilancia cumple con los procedimientos establecidos, que la gente respete las normas de convivencia y que la tecnología opere correctamente forma parte del poder de la supervisión. Los vecinos organizados son los llamados a supervisar y controlar que todo se mantenga dentro de la normalidad.
Cultura de prevención: constituye el conjunto de hábitos seguros de la comunidad. Esta cultura no es espontánea, por lo que requiere la práctica y ejercicio permanente de las normas. Es un proceso de construcción mutuo de confianza entre los residentes. Una puerta que a algún vecino se le olvidó cerrar, deja vulnerables a todos en el edificio. La formación de cultura implica tener siempre presente mensajes claves de prevención, por lo que una comunicación fluida y continua entre los residentes facilita y mantiene el ambiente de tranquilidad que la gente demanda. Si usted es responsable de la seguridad de su condominio invite expertos a hablar sobre el tema, publique información de prevención y protección en las carteleras y coloque mensajes positivos que recuerden a la gente el valor de estar seguros .El objetivo aquí es mantener el lado positivo de la seguridad "top ofmind" de la comunidad. 
Relaciones con el entorno: no pretenda aislarse o evadir la realidad que lo circunda. La principal vulnerabilidad de un condominio es la inconsciencia de sus residentes. La paranoia de la inseguridad la produce la incertidumbre, no el conocimiento. Cuando se establece una relación de cercanía y confianza con otros condominios de la zona, con las policías y con otros involucrados aledaños, se teje una poderosa red que permite compartir experiencias, trasmitir información y nutrirse de buenas prácticas de seguridad.  
La seguridad exige un rol activo de sus actores, no espere que las soluciones lleguen a su casa; por el contrario, de no actuar proactivamente y con prontitud,  es probable que la próxima vez que toquen a su puerta se trate de delincuentes con muy malas intenciones.
@seguritips

domingo, 10 de mayo de 2015

Deterioro del bolívar + inflación = Pobreza

Por Guillermo García N.- El Universal - 10/05/2015. 

En materia cambiaria, Venezuela ha experimentado una amplia gama de políticas, buscando corregir las presiones al alza en el precio del dólar. Luego de la maxidevaluación de 1983 (Viernes Negro), tras varios años de fuga de capitales y de un tipo de cambio fijo, se establece un régimen en el que coexistían tres tipos de cambio: dos de ellos para importaciones prioritarias y pagos de deuda y un tercero libre, lo que introdujo una serie de distorsiones en el mercado cambiario.

El régimen de crawling peg, que fuera adoptado en octubre de 1992 con el fin de frenar la tendencia especulativa que había generado la liberación cambiaria de 1989 en un clima de fuertes presiones inflacionarias y expectativas de devaluación y que consistía en pequeños ajustes (entre 10 y 15 céntimos diarios) sucesivas anunciadas en función del diferencial inflacionario, fue sustituido el 29 de abril de 1994 por un esquema de subastas que entró en operación el 4 de mayo, partiendo con un TC de 118,2 bolívares por dólar.

El nuevo esquema, también de subasta, permitía que el precio del mercado paralelo fuese el marcador para la cotización de divisas, sobreviniendo una rápida y acentuada devaluación del TC, que llevó el precio de la divisa más allá de los 200 bolívares por dólar. Ante estas circunstancias el gobierno, luego de intentar intervenir en el mercado expandiendo la oferta de dólares con lo que logró reducir el precio del dólar a 180 bolívares, se vio obligado a establecer de facto un control de cambios y fijar el TC en 170 bolívares, circunstancia que se mantuvo hasta diciembre de 1995 cuando el bolívar fue objeto de una nueva devaluación, esta vez a 290 Bs./$. En 1996, se deja al tipo de cambio fluctuar dentro de una banda, alcanzando ese mismo año el techo de la misma y manteniéndose esta presión alcista hasta 2015.

Como vemos los controles de cambio han llevado que el valor intrínseco del bolívar se haya pulverizado, generando cada día mayor presión sobre la tasa de tipo de cambio y en la desconfianza del bolívar como moneda de reserva, ahorro y patrimonio, lo que genera a su vez mayor presión sobre la moneda, creando un círculo vicioso de mayor devaluación y mayor inflación y perdida de la confianza. Resultado: empobrecimiento brutal de la población más vulnerable, reducción del poder de compra del salario, inflación galopante y desmejora de la calidad de vida de las mayorías.

¿Cuáles han sido las consecuencias de estas malas políticas?
¡Pobreza! El incremento de la pobreza en los últimos años es consecuencia, entre otros factores:
• Brutal devaluación del bolívar, pasando de 1,9 bolívares por dólar en  2003 a 275,00 bolívares por dólar actualmente (devaluación de 13.859%).
• La brecha cambiaria entre el dólar oficial, a 6,30 bolívares, (absurdo) y el tipo de cambio paralelo de 275 bolívares por dólar (absurdo) pasa de 4.000% de diferencia. Arbitraje fenomenal que crea corrupción y sobrefacturación.
• Del aumento generalizado y continuo de los precios de los bienes y servicios, el proceso inflacionario incide en la pérdida del poder adquisitivo del salario real, y en la capacidad de compra del ingreso, en especial en los componentes de la canasta básica, repercutiendo en los más pobres. Ya la economía venezolana se encuentra con una inflación de tres dígitos. El indicador subyacente (oculta en los subsidios a los alimentos y el control de precios) alcanza 176%.

Salario mínimo en términos de US$
Con el nuevo aumento del 30% equivalente a Bs. 1.686,72 el sueldo mínimo pasa de Bs. 5.622,48 a Bs. 7.309,20. Si lo calculamos al precio del mercado paralelo Bs.275 por dólar, el sueldo mínimo en Venezuela es de US$ 26,57. Es bueno resaltar que el salario mínimo en Cuba es de US$ 19,00 dólares y en Ecuador el salario mínimo es de US$ 354,00 más otros complementos.

Dolarizar en Venezuela una alternativa
La dolarización plena en Venezuela para lograr definitivamente un quiebre total de las expectativas de devaluaciones futuras del bolívar, eliminar la desconfianza y abatir la inflación a un dígito en el mediano plazo, mejorando la calidad de vida de los venezolanos.

Beneficios
Estabilización y reducción de la inflación a niveles internacionales de un dígito
Bajas tasas de interés y con ello mayor acceso a los capitales.
Eliminación de riesgo de emitir dinero sin respaldo lo que provocaba altos índices inflacionarios.
Se descarta cualquier influencia política en el manejo monetario y fiscal del país.
Credibilidad en el esquema monetario y en consecuencia atracción de capitales extranjeros (inversión directa).
Mayor integración a mercados internacionales, de capitales y valores atrayendo inversión foránea de portafolio
La dolarización, no es la fórmula mágica para resolver los problemas económicos del país, pero logrará, a corto plazo, una estabilidad monetaria que incluye una reducción drástica de la inflación a nivel de un dígito, tasas de interés bajas, y de la incertidumbre para invertir.

Asesor Financiero
Candidato AMDP Harvard University


Exportando revoluciones

Por José Vicente Rodríguez Arnal - El Universal - 10/05/2015
En Venezuela el PIB decreció 3% siendo el único país de la región con crecimiento negativo.

Fidel Castro en los años sesenta trató de exportar su revolución comunista a varios países de América Latina, no solo con penetración ideológica sino también dando apoyo logístico y humano a los movimientos guerrilleros que pretendían derrocar a gobiernos legítimamente constituidos, en especial a los venezolanos. Su intento fracasó. Tan solo en Chile, en el gobierno de Salvador Allende, hubo un intento de aplicar las tesis de la revolución cubana, si bien su programa socialista ya había sido propuesto al electorado chileno muchos años antes de la aparición de Fidel Castro en la escena política latinoamericana.

Hugo Chávez después de su asunción a la presidencia de Venezuela en el año 1999, también propició la exportación de la "revolución bolivariana" con el Socialismo del Siglo XXI. Varios países latinoamericanos se identificaron de inmediato con su prédica antiimperialista, populista y socialista. Sus gobernantes no escatimaron elogios a Chávez, mostrando reiteradamente sus simpatías y solidaridad con el chavismo. Entre ellos destacan por su tenacidad los de Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Uruguay, que disfrutaron de un afecto y apoyo muy especial por parte de Chávez.

El intento de Venezuela de inculcar en la región la ideología del Socialismo del Siglo XXI estuvo apoyado no solo con aportes de ingentes recursos financieros sino también con acuerdos para comprarles sus productos, con lo cual se ha favorecido a sus gobiernos, a sus empresarios y a sus trabajadores, sin ninguna contraprestación económica para nuestro país; por el contrario, nuestras importaciones de productos alimenticios ha sido en detrimento de nuestra producción nacional. Sin embargo, la aparente identificación ideológica con la revolución bolivariana parece haber sido solo de carácter retórico pues ninguno de ellos ha aplicado en sus respectivos países el modelo del Socialismo del Siglo XXI. Así observamos que Ecuador tiene su economía dolarizada, siendo el dólar la moneda de curso legal con billetes emitidos por Estados Unidos; Cuba, por su parte, vive un proceso de apertura económica para liberalizar su economía y atraer capitales extranjeros. 

Son evidentes las grandes diferencias que existen entre los exitosos resultados de las políticas económicas en esos cinco países con los obtenidos en Venezuela. Como ejemplo veamos dos indicadores correspondientes al año 2014. El Producto Interno Bruto creció en Bolivia 5,2%, en Cuba 1,1%, en Ecuador 4%, en Nicaragua 4,5% y en Uruguay 3,5%, mientras que en Venezuela decreció 3% siendo el único país en la región con crecimiento negativo. La tasa de inflación en esos cinco países osciló entre un mínimo de 5% y un máximo de 8%. En Venezuela fue de 68,5%, siendo significativo el hecho de que la inflación en alimentos sobrepasó el 100% a pesar de que buena parte de esos productos tienen precios regulados.

En consecuencia, el gobierno venezolano debería evaluar la forma como se ha conducido la economía en esos países que tan buenos resultados les ha dado, ver sus experiencias, oír sus consejos y tomar las medidas necesarias para cambiar el de rumbo de nuestra economía. 

jueves, 9 de abril de 2015

Sistema de Gestión de Proyectos

Por David Uzcátegui D'Lima - El Universal - 9 de abril de 2015


Numerosos estudios de investigación concluyen que los proyectos emprendidos en el mundo presentan problemas graves de desempeño. Tan solo 37%, son liberados a tiempo, dentro del presupuesto y con las características requeridas. 63%, fracasan o fallan. 21%, son cancelados antes de su finalización o entregados pero nunca utilizados. 42%, terminan tarde, por encima del presupuesto o con menos de las funciones requeridas.

Empresas, gobiernos y organismos no gubernamentales ejecutan miles de proyectos cada año. Pocos tienen éxito. Según la CIA Factbook 2010 de la Central Intelligence Agency, en el 2010 los proyectos de tecnología de información (TI) fracasados o con fallas ocasionaron grandes pérdidas. En EEUU: 1,2 billones de US$. En Canadá: 118,8 mil millones de US$. En todo el mundo: 6.200 mil millones de US$. Estas cifras no toman en cuenta las enormes pérdidas económicas anuales en proyectos de construcción, transporte, salud, educación, defensa, agricultura y manufactura, entre otros.

Esto es más grave para los países en vías de desarrollo porque cuentan con menos recursos para inversión. Cualquier falla o fracaso en el desempeño de sus proyectos, implica restar recursos económicos necesarios para atender necesidades de su población.

Estos problemas de desempeño y las exorbitantes pérdidas que ocasionan, ofrecen una magnífica oportunidad para abordar la búsqueda de sus causas, para desarrollar una solución que elimine o atenúe los impactos negativos mencionados. Resolverlos es de suma urgencia y brindaría grandes beneficios.

Los problemas son principalmente de gestión, los cuales pueden ser resueltos en gran medida si se contara con un sistema de información integrado que apoye la gestión de proyectos de toda índole, conforme a las buenas prácticas recomendadas por el Project Management Institute (PMI). La idea es automatizar los 47 procesos definidos en su cuerpo de conocimientos. 

Como parte de nuestro trabajo de investigación en la UCV, estamos desarrollando un sistema que pretende lograr ese objetivo. Con funciones que garantizan la gestión eficaz de los proyectos. Apoyando la planificación y la dirección. Definiendo y asignando desde el comienzo cada una de las tareas que les corresponden tanto a los miembros del equipo del proyecto como a los implicados. Promoviendo una comunicación automática entre ellos cada vez que un evento surge o cambie el estado de una actividad. Definiendo y administrando los riesgos. Registrando las estrategias y conduciendo las acciones para mitigarlos. Generando confianza entre los patrocinadores y los interesados. Documentando todas las acciones emprendidas, conforme a las técnicas definidas por el PMI para cada proceso. Planificando, gestionando y controlando el grado de participación de los interesados, para convertirlos en líderes activamente comprometidos en el éxito del proyecto. Midiendo periódicamente los valores ganados y los costos para terminar el proyecto. Registrando las lecciones aprendidas. Será un sistema "Open Source", desarrollado con la herramienta venezolana Adalid. En un año estará lista la primera versión.

miércoles, 25 de marzo de 2015

Un patio trasero con uranio

Por Marianella Salazar - El Nacional - 18 de marzo de 2015

Las razones por las cuales el presidente Barack Obama firmó el pasado 9 de marzo un decreto de emergencia nacional, donde advierte que Venezuela es una amenaza y un peligro para la seguridad de su país, son muy graves. Según nuestras fuentes de inteligencia, las causas están fundamentadas en pruebas presentadas a un grupo de legisladores republicanos por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, después de finalizar su discurso en el Congreso norteamericano, el pasado 3 de marzo, donde criticó el acuerdo nuclear emergente entre Estados Unidos e Irán y aseguró que esas negociaciones son una garantía de que Teherán obtendrá armas nucleares y pondrá en peligro al mundo. Según las fuentes, Netanyahu, en un esfuerzo para que los republicanos bloqueen el acuerdo, llevó pruebas con coordenadas de los lugares en Venezuela donde los iraníes sacan el uranio para su programa nuclear.
Cuando Netanyahu se marchó de Estados Unidos, varios legisladores se reunieron con Obama para llevarle esas pruebas, y sus asesores de inteligencia comprobaron que eran reales, así que a Obama no le quedó otra que hacer esa declaración con el objetivo de frenar el suministro de uranio. La agencia de inteligencia israelí, el Mossad, viene trabajando durante muchos años en nuestro país y tiene todas las pruebas de los envíos de uranio.
El apoyo de Venezuela al programa nuclear iraní nos insertó en el conflicto mundial, como suministrador de uranio. Los jerarcas chavistas se encargaron de decirle al mundo que Venezuela era el primer aliado de Irán. No es nada nuevo. Por ejemplo, en una reunión de la OPEP (31 enero, 2006) en Viena, el entonces ministro de Minas, Rafael Ramírez, anunció el apoyo al programa nuclear iraní y amenazó con el alza del precio del petróleo si Irán era denunciado ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
La declaración de la Casa Blanca señalando a Venezuela como un peligro para su seguridad y su política exterior, sin explicar los verdaderas razones, han sido un respiro para el desfalleciente gobierno de Nicolás Maduro, que ha sabido cobrarse un costo político y sumarse a la disidencia chavista que hace causa común contra el imperialismo.
La situación política es de una gran ambigüedad, por una parte Maduro permite la entrada de las perforadoras de la Exxon Mobil en nuestras aguas territoriales con Guyana, y por otra se desgarra en inflamas patrioteras y antimperialistas para mantenerse en el poder, atrayendo a militares chavistas que no lo apoyan. Veremos si es capaz de sacarle provecho a la VII Cumbre de las Américas, a realizarse el próximo mes de abril en Panamá, y logra éxito en la “guarimba” que le prepararán a Obama, buscando consenso entre los presidentes aliados. Aunque hasta ahora no cuentan sino con el apoyo de Evo Morales.

Tic tac
1-. Cuba se comprometió con Guyana a impedir que la Fuerza Armada Bolivariana actúe contra la Exxon Mobil, que inició operaciones en aguas de Guyana cuya soberanía está en discusión. A cambio, manejará el negocio a futuro y tendrá garantizado el petróleo cuando Maduro esté fuera del poder. Guyana teme que la Armada proceda contra la plataforma y hunda algún barco, por el antecedente de octubre 2013, cuando capturaron un buque que trabajaba en las aguas en disputa y lo llevaron a la isla de Margarita.
2-. El dinero proveniente de Pdvsa en cuentas de la filial española del Banco Madrid en Andorra pone al descubierto cómo las guerrillas de las FARC disponían de ese dinero para sus compras de armas y pagar al gobierno cubano por las negociaciones de paz realizadas en su territorio. La estadía de los negociadores de las FARC en hoteles cinco estrellas, whisky 18 años y jineteras cubanas no es gratis.

sábado, 21 de febrero de 2015

Nación solvente arruinada por Estado incompetente

Por Gumersindo Rodríguez - El Nacional - 21/2/2015
La brusca caída de los precios del petróleo agrava problema del déficit de las cuentas fiscales internas y de las cuentas de la balanza de pagos de Venezuela. El  impacto de estos desequilibrios influye en la formación de las expectativas racionales  de los principales acreedores del Estado Venezolano
La incertidumbre lógica que la falta de liquidez gubernamental en el corto plazo  impida el pago puntual del principal y de los intereses de sus acreencias -según lo pautado en los respectivos contratos de financiamiento-,se conjuga con la manifiesta incompetencia de los dirigentes públicos de la economía para proteger los valores del patrimonio productivo del Estado  como la base de la garantía  para honrar sus obligaciones externas a mediano y largo plazo. En estas condiciones la crisis de liquidez  genera expectativas racionales de insolvencia pública. Esto significa que para entender cabalmente la gravedad de tal problema, debe considerarse al mismo tiempo el déficit de la credibilidad  externa de las autoridades fiscales y monetarias  que convirtieron una copiosa abundancia de medios externos de pago en una escalofriante escasez cuyos efectos sufren  dentro del país   las mayorías  consumidoras  en interminables colas para comprar alimentos en medio de la represión de soldados, policías y de los miembros de los “colectivos” socialistas.
Esta situación se presenta mas compleja en este momento en que  los precios  del petróleo han  bajado a mas de la mitad de las recientes previsiones de Bank of America-Merril Lynch  y el país entra en el umbral de de una crisis en la que inicialmente el sector público tendría-según Bank of America-Merryl Lynch “un déficit externo de $ 7 mil millones” y debería cancelar $ 6.0bn en la amortización de  la deuda externa.
A la luz de un análisis del contexto de la economía política de las finanzas venezolanas, en este momento las bases de apoyo social del gobierno se están derrumbando bajo el peso creciente de las consecuencias del ajuste impuesto a partir de 2012 que si bien han producido los resultados fiscales y cambiarios registrados por las instituciones  financieras mencionadas, han minado también las bases de apoyo social, civil y militar de un gobierno cuya gestión administrativa rechaza mas de las cuatro  quintas partes de la opinión publica. En estas condiciones, los mismos banqueros norteamericanos dudan de la viabilidad racional de que “las autoridades  consideren no pagar  la deuda internacional, y correr los riesgos del embargo de bienes externos y de los envíos de petróleo, así como la probable reducción en la financiación de proyectos de Pdvsa. Ello impondría costos graves a corto plazo que hacen  improbable que sea una elección racional frente a estos desfavorables precios del petróleo.”
En  la hipótesis  de que la magnitud de los recursos financieros externos del Estado existentes bajo el control de diferentes entes fueran consolidados en una sola cuenta desde la cual se atenderían prioritariamente los pagos de las obligaciones financieras gubernamentales, a medida que sigan descendiendo los precios del petróleo y se incrementen los gastos de contención de la protesta-importaciones de bienes esenciales de consumo, subsidios y sobornos sociales, inversiones político electorales, gastos en personal represivo, equipamiento militar-policial, etc.-,tendera a prevalecer- sobre los pagos del servicio de la deuda-  las prioridades de las erogaciones presupuestarias  relacionadas con la  propia seguridad y estabilidad gubernamental -manipulaciones electorales de corto plazo para mantenerse en el poder, planes improductivos para  crear empleos temporales, etc.
Es también previsible  que  la existencia de la liquidez internacional  que el Gobierno asigne  para cubrir el servicio de las deudas pendientes no garantice  que a los acreedores se les cancelara el capital y los intereses en la secuencia establecida en los contratos respectivos. En la trama cleptocrática existente, el retardo de estos pagos podrá obligarlos a vender sus acreencias -con descuentos sustanciales-  a terceros  enchufados a quienes se les pagara a su valor facial  en beneficios del entorno cleptocrático. En lo referente a la disponibilidad  oficial  para pagar a su vencimiento el servicio de la deuda publica externa, debería certificarse por instituciones financieras autorizadas-Fondo Monetario Internacional, Banco de Transacciones Internacionales (Banco de Basilea),la existencia física en el caso de las reservas de oro y la localización de su custodia ,y especificarse las tenencias de dinero (depósitos  y certificados de depósitos bancarios, instrumentos públicos y privados de inversión, etc.)  y su grado de convertibilidad en liquidez  aceptable como de pago del servicio de las deudas respectivas. Habría que determinar también si estos activos no han sido previamente comprometidos  como garantía colateral para el pago de otras deudas foráneas por razones estratégicas y geopolíticas conectadas con el interés de la cleptocracia gobernante y de su entorno privado .
Un  conducción  diferente de los asuntos económicos del Estado por un Gobierno que no cargue con el creciente déficit de credibilidad política, financiera y ética del que actualmente nos rige, podría contar con parte sustancial de la cuantiosa riqueza financiera externa privada de los residentes venezolanos-cercana a los 500.000 millones de dólares-colocada en los principales mercados  monetarios y de capitales del mundo industrializado, que representan  cerca 20 veces el monto de las reservas internacionales del Banco Central de Venezuela; casi cuarenta veces el monto de los pagos que habría que desembolsar ahora para superar el riesgo de un  default y una situación  de insolvencia crónica del Estado; casi una tercera parte de las reservas estatales de la monarquía saudita; y mas de la mitad del correspondiente fondo de reservas del Gobierno de Noruega.
Sobre la base del inmenso patrimonio productivo del Estado Venezolano –compuesto por sus reservas de petróleo y gas, carbón, hierro, bauxita, oro y empresas de alto potencial de rentabilidad en hidroelectrificación, siderometalurgia, petroquímica, transporte y comunicaciones, etc- las autoridades fiscales podrían emitir obligaciones  indexadas para proteger a largo plazo su valor real en moneda nacional y en moneda internacional-al mismo tiempo que estimularía las inversiones privadas en las actividades productoras de bienes transables exportables y sustitutivos de importaciones en aquellos sectores que procesen –“aguas abajo”-los insumos que –“aguas arriba”-producen los complejos industriales públicos.
La mayoría de los residentes venezolanos- tenedores de esta cuantiosa masa de reservas internacionales privadas- desde un punto de vista sociocultural  y regidos por un gobierno menos irracional y menos atrabiliario, respetuoso de su libertad y de sus legítimos derechos sociales y económicos, preferirían disfrutar de los beneficios de sus fortunas dentro del país donde están históricamente arraigados con su lengua, su cultura, su familia y sus tradiciones y donde el potencial de rendimiento de sus activos podría ser, en términos reales, considerablemente mas elevado que el que  actualmente realizan en los mercados financieros internacionales.

*Ministro de Cordiplan y jefe del Gabinete Económico del Consejo
de  Ministros del Primer Gobierno de  Carlos Andrés Pérez.1974-1977